A causa de un paro cardiorrespiratorio, la madrugada de este sábado falleció José Fernando Mazariegos Anleu, el inventor del Ecofiltro, el cual creó en 1980 cuando laboraba en el Instituto Centroamericano de Investigación y Tecnología Industrial (ICAITI).
Este científico nacido en Panajachel, Sololá, el 21 de marzo de 1938, concibió este invento para contribuir a potabilizar el agua y ayudar a las personas del área rural.
“Cuando desarrollé este proyecto nunca imaginé que llegaría a Camboya, Ghana, Uganda y Kenia, entre otros países. Pero sí tenía claro que este producto, práctico y económico, contribuiría a potabilizar el agua y a salvar vidas”, expresó Mazariegos el 6 de abril durante un acto en el que se inauguró la ampliación de la planta de producción en Ciudad Vieja, Sacatepéquez.
Se graduó como ingeniero químico-farmacéutico en la Universidad de San Carlos de Guatemala y se especializó en Control de Calidad en la Asociación Francesa de Normalización y Control de Calidad. Laboró en el ICAITI durante más de 30 años.
Nuevo proyecto
Hace 2 meses declaró que estaba inmerso en un proceso de investigación y desarrollo para crear discos purificadores, que serían de 11 pulgadas.
Esta investigación ganó el segundo lugar en un concurso del College of Global Sustainbility de los Estados Unidos, por la innovación en el método de brindar agua segura a los usuarios.
La tecnología del Ecofiltro se ha replicado en 39 países, mediante 59 fábricas, y en Guatemala ha logrado ventas por arriba de los 350 mil desde 2010, comentó Philip Wilson, director ejecutivo de la compañía.
De acuerdo con cálculos de la empresa, el 70 % de los usuarios del Ecofiltro son del área rural. Su uso ha contribuido a una reducción anual de 200 mil toneladas de dióxido de carbono, y por cada mil filtros utilizados se evita la muerte de 4 personas al año.
Entre los planes de Wilson, para este año, está incrementar la producción a 125 mil unidades, razón por la cual invirtieron Q4 millones en la ampliación de la planta de producción.