Roma – EFE
El británico Chris Froome (Sky), quien conquistó hoy la decimonovena etapa del Giro de Italia y que se hizo con la maglia rosa, consideró que sus piernas “estarán cada vez mejor” con el pasar de los días de competición.
Froome atacó hoy a falta de 82 kilómetros para el final, en la subida al Colle delle Finestre, y aprovechó el bajón de forma de su compatriota Simon Yates (Mitchelton Scott) para arrebatarle la camiseta rosa de líder de la clasificación general.
“Mañana será otro día difícil, pero mis piernas estarán cada vez mejor con el pasar de los días”, afirmó el británico, quien cuenta con un margen de 40 segundos sobre el holandés Tom Dumoulin (Sunweb) en la clasificación general, en declaraciones difundidas por los organizadores del Giro.
“Creo que nunca había atacado a 80 kilómetros de la línea de meta en mi carrera. He corrido solo y he llegado hasta el final. El equipo hizo un trabajo fantástico para permitirme hacerlo”, explicó Froome, al repasar su gran actuación.
“Primero debíamos alejarnos de Yates y luego huir de Dumoulin. Para pasar de la cuarta a la primera posición (en la general) no podía esperar la última subida. El Colle delle Finestre era el sitio perfecto para atacar”, prosiguió.
El británico, cuatro veces ganador del Tour de Francia, deberá defender su ventaja sobre Dumoulin en las últimas dos etapas, que se correrán entre Susa y Cervinia (218 kilómetros) y en Roma, en una prueba en línea de 115 kilómetros.