Rusia se pronunció ayer contra la resolución propuesta en el Consejo de Seguridad de la ONU para establecer una tregua de un mes en Siria, y acusó a sus promotores de buscar únicamente aumentar la presión sobre el régimen de Damasco.
El embajador ruso ante las Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, dio a entender que su país vetará el texto si finalmente se somete a votación en las próximas horas, tal como quieren sus impulsores, Suecia y Kuwait.
“Los patrocinadores saben perfectamente que no hay acuerdo”, dijo Nebenzia, que anteriormente ya había expresado reticencias sobre esta iniciativa, que lleva días siendo negociada.
El representante ruso insistió en que no ha recibido explicaciones sobre las “garantías” de que la tregua sería respetada, y aseguró que este tipo de alto el fuego sería una medida “populista”. EFE