Por: Marco Antonio Monzón
Con el desarrollo de los procesos de gobernanza se pretende promover espacios de inclusión, participación y empoderamiento de las autoridades locales, actores institucionales y líderes comunitarios, fortaleciendo sus capacidades para el análisis y priorización de la problemática SAN, incorporándola en la toma de decisiones que permita la construcción de diagnósticos de situación y planes de acción de SAN. Para ello se requiere del rol protagónico de los gobiernos municipales, representados en la autoridad del alcalde municipal, y la fortaleza de los consejos de desarrollo. Se busca que todos los actores de la gobernanza conozcan los lineamientos establecidos por el ente rector del tema SAN y que apliquen la misma lógica de abordaje, herramientas, monitoreo y rendición de cuentas.
La Sesan, con el apoyo de organizaciones socias, ha sistematizado experiencias exitosas en diferentes ámbitos geográficos del país, donde se han fortalecido los tejidos sociales locales por medio de la sensibilización a las autoridades municipales y líderes comunitarios; además, ha favorecido la organización comunitaria y la valoración del rol de líderes y lideresas de cada uno de los territorios, como ciudadanos sujetos de derechos y responsabilidades que han reconocido su papel activo en la toma de decisiones que impactan favorablemente su vida cotidiana, como base para dar seguimiento efectivo a las acciones de la Estrategia Nacional para la Prevención de la Desnutrición Crónica, y actuar de forma efectiva ante los riegos y crisis de InSAN.
La participación y liderazgo de los alcaldes municipales es clave para lograr una gobernanza efectiva en SAN, ya que se convierten en el gestor del municipio, defendiendo los derechos de la población, especialmente el de la alimentación, para que las familias tengan una buena alimentación y nutrición. El Código Municipal faculta a las autoridades municipales a abrir las Oficinas Municipales de SAN -OMSAN-, las cuales facilitan la apropiación e institucionalización del tema a lo interno de las municipalidades, así como la inversión municipal en SAN. Por otro lado, el empoderamiento en los líderes comunitarios provoca que accionen oportunamente, haciendo gestión e incidencia institucional en respuesta a sus problemáticas, así como el acompañamiento de acciones de auditoría social, como parte de la rendición de cuentas sobre los recursos invertidos.
Estas acciones han permitido la construcción de propuestas en la búsqueda de un bien común, la promoción de la seguridad alimentaria y nutricional y la vigencia de los derechos humanos para el cambio social y el desarrollo integral, entre otros.