República Dominicana anunció el establecimiento de relaciones diplomáticas con China y la ruptura de los lazos con Taiwán de forma inmediata. La decisión de Santo Domingo supone un duro golpe diplomático para Taipéi, que ha visto mermado su apoyo internacional en Centroamérica en los últimos años por las presiones de China. El acuerdo que oficializa los lazos entre China y República Dominicana fue realizado por los titulares del Ministerio de Exteriores de ambos países, Wang Yi y Miguel Vargas, en Pekín.
El pie que ha puesto la República Popular de China en la región Centroamericana es probablemente la búsqueda de dos objetivos: ganar una palanca de poder estratégico y su permanente búsqueda de recursos naturales. Según especialistas, China buscaría materias primas que su industria necesita, así como alimentos y fuentes de energía. Por su parte, América Latina encuentra en China un gran mercado de elevado crecimiento para colocar su petróleo, sus minerales, su producción agrícola, así como una fuente importante de préstamos y de inversión de capital.
Costa Rica fue el único país que abrió relaciones diplomáticas oficiales en 2007 con China, y posteriormente se unieron otros países de la región centroamericana y del Caribe. En 2009 empezaron a triplicarse paulatinamente las importaciones; por lo tanto, los analistas en relaciones internacionales califican el lobby de China como la “diplomacia del dólar” en una región que representa el sexto lugar de América Latina. Con esta ruptura, Taiwán se queda con solo 19 aliados diplomáticos, 10 de ellos en Latinoamérica y el Caribe, que sigue siendo la zona con mayor apoyo diplomático a la isla.