El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, presentó este día su programa para las elecciones presidenciales y parlamentarias adelantadas del 24 de junio próximo y prometió más democracia, más justifica social y más prosperidad.
“Nuestra prioridad será establecer la estructura institucional de la Justicia y con ello lograr más justicia social tras el 24 de junio”, dijo Erdogan ante el congreso provincial del gobernante partido de Justicia y Desarrollo (AKP) en Estambul.
En su discurso, retransmitido en directo por las principales emisoras del país, el presidente conservador islamista afirmó que fomentar la justicia social en el ámbito económico, laboral y político es “una de las prioridades” del AKP.
“Con el sistema presidencial de Gobierno, el ingreso nacional subirá y como se distribuirá por las bases, la brecha entre los grupos de ingresos se cerrará rápidamente”, explicó Erdogan.
El presidente turco, quien ha adelantado las elecciones en casi un año y medio de noviembre 2019 a junio próximo, espera ganar las presidenciales y con ello convertirse en el primer jefe de Estado turco con plenos poderes ejecutivos.
Turquía votó el año pasado en un referéndum a favor de un cambio constitucional que le otorgará al próximo presidente elegido todos los poderes ejecutivos y elimina la figura del primer ministro.
El país vive actualmente un “boom” económico, con tasas de crecimiento por encima del 7 por ciento, aunque la mismo tiempo la inflación supera el 11 por ciento y la lira turca ha caído a mínimos históricos.
Todos esos problemas se solucionarán con el gobierno presidencialista, aseguró Erdogan hoy ante sus seguidores, a los que prometió que el nuevo gobierno le dará a la economía y, también a la democracia, un “nuevo impulso”, al tiempo que prometió tipos de interés más bajos y una reducción de la inflación.
El nuevo sistema, dijo, “hará que el legislativo sea más prestigioso, que la administración tenga más poder y que la judicatura sea más independiente”.
La oposición turca y organizaciones internacionales de derechos humanos critican justamente lo contrario, que Turquía bajo Erdogan se encuentra en una deriva autoritaria, con menos derechos y una Justicia cada vez más dependiente del poder político.
Por otra parte, Erdogan anunció hoy nuevas ofensivas militares en el norte de la vecina Siria para después de las elecciones con el fin de proteger al país del terrorismo.
“No vamos a dejar de apretar a las organizaciones terroristas. Vamos a agregar nuevas (ofensivas). Nuestros soldados están listos para nuevas misiones”, aseguró.
Turquía lanzó en agosto de 2016 una amplia ofensiva en el norte de Siria, llamada “Escudo del Eufrates”, y otra en enero de este año en el enclave kurdo sirio de Afrin con el nombre “Rama de Olivo”.
El objetivo es alejar a milicias kurdo-sirias, que Turquía considera terroristas, de la frontera turco-siria.