La reciente apertura de relaciones diplomáticas con China, segunda potencia económica mundial, despierta grandes expectativas en República Dominicana, que confía en que con este giro diplomático se generen nuevas oportunidades de inversión, comercio y turismo.
Al anunciar, el pasado lunes, la ruptura de sus históricos lazos con Taiwán para establecer relaciones diplomáticas con China, el Gobierno dominicano lo justificó argumentando el inmenso potencial de crecimiento comercial que representa.
La decisión ha sido recibida con entusiasmo por los principales gremios empresariales, que desde hace varios años habían pedido al Gobierno dominicano un mayor acercamiento diplomático, comercial y económico con China.
Para el presidente de la Asociación de Industriales de República Dominicana (Aird), Campos de Moya, es un paso muy importante porque esta isla caribeña “se puede convertir fácilmente en un punto intermediario en la manufactura china hacia el mercado de América”. Otros, como el presidente de la Asociación Dominicana de Exportadores (Adoexpo), Luis Concepción, consideran que también beneficiará a la agroindustria local.
También ha expresado su optimismo el sector turístico dominicano.