Por: Israel Ríos, Oficial de Nutrición de la FAO para Mesoamérica y El Caribe
En las últimas décadas, nuestros sistemas alimentarios han experimentado cambios que han transformado los patrones alimentarios de América Latina y el Caribe. La región enfrenta la denominada doble y triple carga de malnutrición y la desnutrición infantil. Con ello coexisten el sobrepeso y la obesidad, que van ganando terreno. Se estima que el sobrepeso afecta a 1 de cada 2 personas en la región, y la obesidad, a 1 de cada 4. Para combatir todas las formas de malnutrición, la FAO promueve la transformación de los sistemas alimentarios. Son conocidos los beneficios de las frutas: son fuente rica de vitaminas, minerales, agua, fibra y sustancias antioxidantes, que fortalecen el sistema inmunológico y previenen enfermedades.
La FAO contribuye a promover su consumo como alimento indispensable en la dieta diaria, además de apoyar los procesos de educación alimentaria y nutricional que fomenten hábitos alimentarios saludables. En Centroamérica y la República Dominicana, frutas como el banano, la piña, el melón, la sandía, la naranja o el coco están presentes en las dietas tradicionales y tienen un papel destacado en la economía de muchos de estos países. El 3 de mayo de cada año se conmemora el Día Regional de las Frutas. Esta celebración es parte de los esfuerzos para hacer visible la importancia de las frutas y una excelente oportunidad para animarles a adoptar el hábito de consumirlas a diario de forma natural. Consumir frutas es sencillo, y no solo alimenta y nutre al cuerpo sino que, además, contribuye al desarrollo económico de nuestras comunidades.