La noche del lunes transcurría con normalidad para todos, excepto los seguidores de Mon Laferte, quienes esperaban con ansias el primer concierto de la cantautora chilena en Guatemala. A las 21:10, el escenario de Fórum Majadas se tornó oscuro y, entre gritos que superaban en decibeles las notas de Antes de ti, pudieron divisarse los destellos de un vestido púrpura.
Amor declarado
Luego de abrir el concierto con su más reciente sencillo, Mon Laferte tomó su guitarra y acompañada de los coros de sus fans entonó a todo pulmón Si tú me quisieras, Salvador y Pa’ Dónde se fue, con solo incluido. Aunque, la verdadera ovación se desató al escuchar las primeras palabras de la de Viña del Mar. “Muchas gracias a todos por venir, estamos muy felices. Disfruten mucho, lloren, griten y declaren su amor”, aconsejó.
El sentimentalismo continuó y el público alzó sus manos en Que sí, para después dejarse seducir por las armonías pasivas de Primaveral, en el que Laferte incluso se alejó del micrófono para escuchar las voces de su audiencia.
A la vez que surgían los múltiples “¡Te amo Mon!”, la artista entró en confianza y cautivó con los movimientos sensuales de Flor de amapola, Vuelve por favor y Mi buen amor, que originalmente canta con Enrique Bunbury. Sin dejar de coquetear, optó por los sonidos acústicos de El Cristal y La trenza, que hicieron correr las lágrimas entre hombres y mujeres.
Un final enérgico
La cúspide emotiva y enérgica llegó en Amárrame, con la que puso a bailar a todos. Mas, la adrenalina se revolucionó con No te fumes mi marihuana, en la que Mon decidió lanzarse a los brazos del auditorio. Al regresar a la tarima, interpretó El Diablo y pronunció “¡Gracias, los amamos!”. Fue solo un amago de despedida, ya que volvió para lanzar besos al aire y cantar Tu Falta de querer y Tormento, recibidos por el público con una rara mezcla de llantos y sonrisas.