El Barcelona se mantiene como líder invicto de la liga después de empatar en Balaídos contra el RC Celta (2-2), en un vibrante partido en el que el equipo gallego, liderado por Iago Aspas, atacó con descaro la portería del conjunto catalán, que reservó su habitual equipo titular para la final de la Copa del Rey.
El conjunto azulgrana mantiene sin mancha alguna su hoja de ruta hacia el título de liga. Nada altera su curso impecable. Ni las bajas de Iniesta, Busquets, Rakitic y Piqué. Ni la suplencia de Messi, Luis Suárez, Alba y Umtiti. Sigue invicto, pese a sufrir un mundo en Balaídos, un dolor habitual en las últimas temporadas.
El ritmo del inicio fue trepidante. Coutinho lideró la versión B del Barcelona, la cual venció con anotaciones de Ousmane Dembélé (36) y Paco Alcácer (64), aunque no con un juego suficiente para atemorizar al Celta, que cumplió el guion que suele diseñar Unzué: presión alta y salida rápida de la pelota.
El Barcelona asistió con asombro al empuje gallego, que le permitió a los de casa reaccionar y empatar gracias a Jonathan Castro Otto (45) y Iago Aspas (82), quienes permitieron el dominio con orden de los suyos sobre la escuadra rival.