Los cuatro favoritos para ganar la Liga de Campeones, Barcelona, Manchester City, Real Madrid y Bayern Munich, evitaron enfrentarse entre sí en un sorteo de cuartos de final que no emparejó a ninguno de los grandes candidatos a levantar el título en Kiev el próximo 26 de mayo.
El exfutbolista ucraniano Andriy Shevchenko se encargó de ejercer de mano inocente en la sede de la UEFA en Nyon. Con decisión, una a una, sacó todas las bolas que en pocos minutos solventaron un sorteo que benefició, sobre todo, al Barcelona.
El conjunto azulgrana se emparejó con el Roma y el partido de ida se disputará en el Camp Nou. Los hombres de Ernesto Valverde, a priori, son los favoritos. Con Lionel Messi en plena forma y con un camino casi intachable en la competición, el cuadro italiano tiene menos opciones de alcanzar las semifinales.
Los hombres de Zidane se jugarán la temporada con el buen recuerdo de la final de Cardiff, donde ganaron 1-4 a la “Vecchia Signora”. Fuera del resto de competiciones, se encomendarán a superar a su rival en dos partidos para mantener su única ilusión del curso.
El candidato alemán, el Bayern, tendrá que superar al Sevilla en un duelo inédito en los torneos europeos. Así lo decidió la mano derecha de Shevchenko, que emparejó a dos equipos que jamás se han cruzado ni en la Copa de Europa, ni en la Copa de la UEFA ni en la extinta Recopa.
El Liverpool-Manchester City cerró el sorteo. Fue el último emparejamiento y el único entre dos equipos de un mismo país. El millonario proyecto de Pep Guardiola no lo tendrá nada fácil. Su rival es un equipo muy competitivo formado por auténticas flechas expertas en contragolpes mortales. EFE