El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, expresó su expectativa para este año: alcanzar el objetivo de invertir un 2 % de su PIB en defensa, una meta a la que solo llegan de momento cuatro de los 29 socios y a la que todos se comprometieron para 2024.
“Un entorno de seguridad más incierto significa que los aliados de la OTAN necesitan invertir más en defensa, desarrollar capacidades correctas y contribuir a nuestras misiones y operaciones”, subrayó el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, durante la presentación del informe anual.
La necesidad de repartir la carga económica entre los miembros de la Alianza es la principal exigencia de Washington hacia sus socios europeos, un objetivo que en 2017 solo cumplieron, además de Estados Unidos, Grecia, Estonia y el Reino Unido.
A ellos se sumarán este año Polonia, Rumanía, Letonia y Lituania, consideró hoy el representante del organismo.
España, entre los que menos invierten
En el caso de España, que ya ha anunciado que no llegará al 2 % en 2024, el gasto militar fue del 0.92 % del PIB en 2017, lo que la sitúa entre los socios que menos invierten en gasto militar, solo por detrás de Bélgica y Luxemburgo, pese a ser el quinto que más lo incrementa en términos reales (+ 18.25 % respecto a 2016).
El porcentaje de gasto del PIB destinado a defensa alcanzó el 3.35 % en Estados Unidos y el 1.16 % en Canadá, lo que sitúa en el 2.42 % la inversión media de todos los aliados.
Además del objetivo del 2 %, los aliados se comprometieron a invertir un 20 % o más de sus presupuestos en defensa en grandes capacidades (equipamiento), un objetivo al que han llegado ya, o se acercan, quince aliados, entre ellos España (19.31 %), Italia (20.94 por ciento) o Francia (24.17 %).
El Reino Unido informó este miércoles al resto de sus socios del uso de una sustancia de naturaleza militar desarrollada por Rusia y señaló como “altamente probable” que este país estuviera detrás del envenenamiento de Skripal, que trabajó para el espionaje ruso antes de ser condenado en 2006 a trece años de prisión por hacerlo para los servicios secretos británicos.