El director de orquesta español Jesús López Cobos, que llevó la batuta ante algunas de las más importantes formaciones musicales del mundo, falleció hoy en Berlín a consecuencia de un cáncer, informó su agencia.
Nacido en 1940, tras acabar sus estudios de Filosofía en Madrid, decidió dedicar su vida a la dirección de orquesta, para lo que se diplomó en el Conservatorio de Viena en el área de Composición.
Aparte de situarse al frente de grandes orquestas de todo el mundo, López Cobos fue director general de la Ópera de Berlín entre 1981 y 1990, director de la Orquesta Nacional de España entre 1986 y 2000 y de la Orquesta Sinfónica de Cincinnati (EE. UU.) entre 1990 y 2000.
Desde 2003 y hasta 2010 fue director musical del Teatro Real de Madrid. Peter Maag, de quien fue su ayudante en Venecia (Italia), le dio su primera oportunidad al proponerle dirigir como titular La Flauta mágica de Mozart, uno de sus primeros pasos hacia el podio.
“Amaba su trabajo por encima de todo y sabía que el cincuenta por ciento de su quehacer sobre el podio consistía en explicar a los músicos su visión de cada obra, sin querer imponer que esta fuera la única posible”, añade la nota de la agencia del director.
López Cobo disfrutaba especialmente dirigiendo ópera y Così fan tutte de Mozart, que era su favorita, por “su sabia combinación entre la alegría de saberse vivo y la tristeza de algunos de los pasajes de nuestro propio devenir en este mundo”.
También se sentía muy identificado con el Réquiem de Brahms por su concepción filosófica, obra con la que según sus agentes “querría ser recordado hoy”. Los restos de López Cobos serán trasladados a España, donde serán enterrados en su ciudad natal, Toro (norte).
*EFE