Un gol del francés Kevin Gameiro a los 6 minutos prolongó la racha del Atlético de Madrid, con su sexta victoria consecutiva en competición rumbo a los octavos de final de la Liga Europa y a una semana decisiva por el torneo doméstico, y la suya propia, con su quinto tanto en sus últimos 7 partidos (1-0).
Son los dos datos principales que extrajo el equipo rojiblanco de un encuentro que ganó sin exprimirse y sin sobresaltos frente al Copenhague en el estadio Wanda Metropolitano, el último requisito que le quedaba para presentarse en el sorteo de hoy del torneo continental como el más firme favorito y el rival a evitar.
El partido era un trámite desde hace una semana, después del 1-4 de la ida, pero desde el miércoles con algún matiz, enturbiado porque las últimas horas habían sido agitadas en la actualidad del Atlético, desde el rotundo “no” de Simeone a hacer todo lo posible para que siga Torres hasta el probable traspaso de Carrasco a China.
Si la eliminatoria no admitía dudas, el encuentro de vuelta tampoco. Era y fue del equipo rojiblanco, además rápidamente, desde el minuto 6, cuando Gameiro transformó el monólogo inicial del conjunto madrileño en el 1-0. El atacante ha tomado impulso en este 2018: 5 goles y 2 asistencias en 8 duelos.
Mientras en el banquillo descansaron titulares para Sevilla como Griezmann, Saúl, Vrsaljko –Diego Costa y Filipe Luis no habían entrado ni siquiera en la convocatoria– y Jan Oblak, el elegido también en la portería para la Liga Europa, observaba con toda la calma del mundo el encuentro.