Las autoridades de Honduras abrieron hoy al tráfico la carretera que desde el municipio de Omoa conduce a Corinto, fronterizo con Guatemala, después de que permaneciera cerrada los últimos cinco días por daños causados por las lluvias.
Esta mañana se reanudó el tráfico por esta vía, que permaneció cerrada desde el pasado martes debido a que colapsó por las precipitaciones asociadas a un frente frío que han dejado 6 muertos y más de 500 familias afectadas por las inundaciones.
“Los trabajos de reparación de la vía, que resultó hundida por los torrenciales aguaceros en la semana anterior, han sido intensos y ya están concluidos”, dijo a periodistas el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Roberto Pineda.
Señaló que el tránsito por la vía resultó “afectado bastante” para muchas personas que trataban de llegar a Guatemala o zonas aledañas.
Las precipitaciones que afectaron a Honduras la semana anterior han dejado 6 muertos, 5 de ellas murieron cuando un alud de tierra cayó sobre una vivienda en una comunidad de Omoa.
La sexta víctima reportada es un hombre, no identificado aún, cuyo cuerpo fue hallado el miércoles pasado en la orilla de una playa de Omoa.
Los socorristas aún no han podido localizar el cuerpo de Clotilde Iraheta, de 50 años, quien está desaparecida desde el miércoles después de que el deslizamiento de tierra destruyó la vivienda donde residía.
El clima ha mejorado en el país, aunque se mantiene un descenso de las temperaturas.
*Con información de ACAN-EFE.