Proteger a los civiles y a los defensores de los derechos humanos que se encuentren en peligro inminente de sufrir violencia física, es el mandato del XVII Contingente de Cascos Azules de las Fuerzas Especiales de Guatemala, que apoya a la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo.
Mishell Toscano, vocera del Ministerio de la Defensa Nacional, indicó que mientras los 150 elementos castrenses realizan labores en cumplimiento al mandato de dicha misión, también se contribuye en el llenado de cisternas con agua que es abastecida en los asentamientos cercanos a áreas de conflictos. “Cada elemento participante se ha formado en materia de derechos humanos”, señaló.
Por otro lado, también se ha colaborado con el remozamiento de escuelas para la dignificación de los estudiantes, mediante ambientes adecuados para su aprendizaje. Además, se realizan actividades lúdicas en las que los pequeños puedan desarrollar sus habilidades psicomotrices bajo los conceptos de convivencia pacífica y respeto hacia el prójimo, así como organizar y ejecutar jornadas médicas en favor de la salud de la población.
Estas acciones también fueron realizadas en la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití, en la que, durante el tiempo que estuvo en esa región, se construyó la Escuela República de Guatemala, que cuenta con un parque infantil que fue construido por los connacionales que formaron parte de esa operación de paz.
Desde el comienzo de la participación de Guatemala, como parte de la fuerza multinacional de la ONU, el Ministerio de la Defensa Nacional ha incrementado la participación femenina, por lo que, a la fecha, se ha desplegado a 173 mujeres.
Los Cascos Azules de Naciones Unidas tienen la misión de supervisar el cumplimiento del alto al fuego, velar por el desarrollo de la paz y la seguridad en el mundo.