En un encuentro de 2 días, no menos de 280 padres de familia de todo el país discuten el papel que les compete en la formación de sus hijos, así como las estrategias que puedan implementar como una colaboración para mejorar los procesos de enseñanza-aprendizaje.
Así, los también miembros de Organizaciones de Padres de Familia (OPF) participan desde ayer en el primer Congreso Nacional de Padres en Apoyo a la Educación que organizó la cartera del ramo.
El cónclave fue inaugurado por los viceministros de Educación, José Moreno y María Eugenia Barrios, y delegados de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional y la entidad Save the Children.
Citas regionales
Moreno indicó que la actividad es la culminación de una serie de precongresos regionales en los cuales, en cada edición, hubo participación de entre 600 y 800 padres, de quienes se seleccionó a los líderes que fueron convocados en la cita de ayer y hoy.
“Ellos recibirán herramientas para afrontar las necesidades que surgen en las escuelas y gestionar las soluciones desde su enfoque como padres. Estamos seguros que con su colaboración los cambios llegarán más rápido y de mejor manera a las comunidades”, subrayó el funcionario.
El involucramiento de los progenitores ya se vive, recordó Moreno. “Llegan a las escuelas, se turnan para cocinar los alimentos. Lo hacen desde una perspectiva de compromiso personal y con la comunidad”, añadió.
Actualmente la cifra de OPF en todo el territorio supera las 20 mil y se estima que se están alcanzando las 27 mil, de 33 mil planteles públicos, concluyó el viceministro.