La Secretaría de Bienestar Social (SBS) fortalece el Plan Individual para 450 adolescentes que fueron sancionados por tener conflictos con la ley penal, el cual se ejecuta por medio de la Dirección de Medidas Socioeducativas y consiste en el acompañamiento a los menores, de acuerdo con el castigo alterno a la privación emitida por el juzgado competente.
El programa cuenta con los servicios básicos y cumple con garantías legales, respetando el marco legal de la niñez y la adolescencia, que consiste en ayuda psiquiátrica, educativa, psicológica y trabajo social.
De acuerdo con la información, los beneficios son controlados por la Dirección de Prevención Terciaria, los cuales se inician 6 meses antes de recibir la sanción y se extienden igual número de meses posteriores al
castigo.
Verónica Galicia, jueza que conoce casos de menores, considera que estos merecen una segunda oportunidad, pues “son jóvenes y tienen un futuro por construir”. A criterio de la juzgadora, la mayoría de los jóvenes aprenden la lección, y “el período en que fueron privados de libertad les marca la vida”.
Galicia opinó que los programas implementados por la SBS están entre los pilares más importantes para la reinserción a la sociedad de los infantes sancionados, y se hace necesario expandir la cobertura judicial en el interior del país, a fin de garantizar el acceso a la Justicia y agilizar los casos que se registren.
Fernanda Padilla, psicóloga de adolescentes, indicó que las sanciones “marcan la vida de los jóvenes y la mayoría no quiere repetir la historia. Aprenden la lección”. Agregó que por ser menores consiguen otra oportunidad.
