La empresa Apple presentó ayer tres nuevos modelos de iPhone, entre ellos el muy esperado iPhone “X” para celebrar el décimo aniversario de su línea de smartphones, con capacidad para desbloquearse con reconocimiento facial y otras refinadas funciones.
El “X” presenta una nueva fisonomía: no tendrá ya el famoso botón redondo de Home que habitualmente está situado en la base de la pantalla, que ahora ocupa toda la parte delantera del teléfono. Como esperaban los analistas, este dispositivo cuenta con una pantalla Oled, que ofrece una imagen más nítida y contrastada que la estándar de LCD.
“La otra novedad es que la terminal está bloqueada hasta que tú lo miras y te reconoce”, indicó Phil Schiller, uno de los ejecutivos del grupo en el escenario del Teatro Steve Jobs. El identificador de rostro (Face ID) utiliza sensores y una cámara de foto que permite conocer los rasgos en tres dimensiones.
En números
Los aficionados deben desembolsar US $999 (Q7 mil 290) por el modelo de iPhone X, pero deberán esperar al 27 de octubre para hacer los pedidos, y las entregas empezarán el 3 de noviembre.
El iPhone “X” es “verdaderamente una maravilla de ingeniería sobre todo comparado al 7 y al 8. Y no es una simple copia de los modelos competidores”, comentó el analista Patrick Moorhead.
Desde su lanzamiento en 2007, el iPhone ha revolucionado el sector y ha vendido ya no menos de mil 200 millones de ejemplares. La firma estadounidense también mostró otros dos modelos de iPhone, denominados iPhone 8 y iPhone 8 Plus, disponibles a partir del 22 de septiembre en US $699 y US $799 ((Q5 mil 100 y 5 mil 824),
respectivamente.
Estos incluyen la realidad aumentada, que permite insertar personajes de videojuegos u objetos en un universo real. Esto se ve como un futuro para los móviles.
La compañía también enseñó un mejorado teléfono inteligente y un sistema de video en streaming para televisores que son de alta definición.