Para que el nombre de Margarito Sucuc no quede en el olvido, el ministro de Salud, Carlos Soto, y autoridades del Hospital Roosevelt develaron una placa en la memoria de quien laboró 14 años como guardia del nosocomio y que fue una de las 7 víctimas mortales del atentado ocurrido en el centro asistencial el pasado 16 de agosto.
“El guatemalteco no tiene memoria histórica, pues, a menos de un mes de su fallecimiento, a muchos ya se les olvidó la labor que él hizo: cumplir su función. Fue un hombre sin armas, pero con un gran corazón”, manifestó el jefe de la cartera salubrista, durante el homenaje póstumo.
Sucuc era oriundo de la comunidad San Juan Palima, Comalapa, Chimaltenango, y se encontraba en la entrada del centro asistencial cuando supuestos pandilleros de la Mara Salvatrucha perpetraron el ataque para rescatar a uno de los suyos, Anderson Daniel Cabrera Cifuentes, alias Chatía.
Por eso el gesto conmemorativo, para reforzar la idea de no olvidar los hechos. “La reflexión es a no olvidar las cosas que suceden en Guatemala; tenemos que tenerlas presente siempre”, subrayó Soto.
Recompensa
Señalado de asesinato, asesinato en grado de tentativa, asociaciones ilícitas y conspiración, Chatía es buscado por las autoridades. Por información que dé con su paradero, se ofrece un monto de Q150 mil.
#SeBusca
Si posee información sobre la ubicación de Anderson Cabrera Cifuentes denuncie al 110, 1561 o 1518.
Recompensa de hasta Q150 mil. pic.twitter.com/mZ95WURzVl— MinGob (@mingobguate) 5 de septiembre de 2017