El número uno mundial Rafael Nadal y la japonesa de sangre haitiana Naomi Osaka fueron los principales protagonistas ayer en la segunda jornada del Abierto de Estados Unidos, afectado por las fuertes lluvias que obligaron a la cancelación de partidos.
El mal tiempo que se presentó de improvisto al filo del mediodía, obligó a cancelar 44 partidos individuales y posponer la finalización de otros 11 en curso en las canchas de cemento al aire libre de Flushing Meadows, Nueva York, donde se disputa el US Open.
Empero, el partido de Nadal contra el serbio Dusan Lajovic no se vio afectado por jugarse en el estadio Arthur Ashe, techado desde el pasado año.
Luego de controlar un entusiasmo tempranero de su rival, que se adelantó 3-1 al quebrarle el saque, Nadal puso el pie en el acelerador y llegó a ganar ocho games seguidos para asegurar la victoria con parciales de 7-6 (8/6), 6-2, 6-2, que le abrió las puertas a la segunda ronda del torneo.
“Entré algo desconcentrado; mucha humedad en la cancha”, se quejó el español, campeón del US Open en 2010 y 2013. Su rival en turno, en segunda ronda, saldrá del tope de hoy entre el japonés Taro Nadiel y el local Tommy Paul.
El español ha regresado al primer puesto del ranquin mundial por primera vez desde 2014, avalado por una temporada de éxitos que incluye su récord de 10 títulos en el Roland Garros de Francia y la final del Abierto de Australia.
