Se conformó una comisión de seguimiento.
Conforme se indicara en la columna anterior, en el marco del Día Mundial de los Pueblos Indígenas, el Conadi con el apoyo del Fondo de Desarrollo Indígena Guatemalteco, CBM Internacional y CISP de Italia, llevó a cabo el Encuentro Regional de Líderes Indígenas con Discapacidad, con participación de sesenta dirigentes de ocho países de la región latinoamericana, quienes hicieron un análisis de la situación actual de la población indígena con discapacidad, que en su mayoría no cuenta con recursos que le permitan un desarrollo en pié de igualdad.
Derivado del análisis se concluye que en América Latina, las personas indígenas con discapacidad viven en pobreza y extrema pobreza, contando únicamente con el apoyo de su familia y muy escasamente, con la contribución de organizaciones locales, ya que un 80 por ciento de los servicios para esta población, se ubican en los centros urbanos bajo la administración de entidades de carácter privado, muchas veces con costos y condiciones fuera de su alcance.
Las barreras físicas, de comunicación e información se acentúan significativamente y existe un marcado desconocimiento de sus derechos, fenómeno que limita los espacios de participación en igualdad de condiciones y oportunidades, a lo que debe sumarse la carencia de recursos en las comunidades, donde por falta de información prevalecen creencias y estereotipos hacia una situación de discapacidad, hecho que deriva en marginación, exclusión y discriminación.
En Guatemala existen organizaciones de personas con discapacidad en las comunidades indígenas, en las que se empieza a encaminar el trabajo para dar visibilidad a los indígenas con discapacidad, especialmente en el occidente del país, labor que deberá fortalecerse y apuntalarse, de tal manera, que se constituya base del trabajo que a futuro se impulse en pro de esta población, de lo contrario seguiremos aceptando a diario actos de discriminación.
Como resultado del evento se conformó una comisión de seguimiento, con participación de líderes de Huehuetenango, Sololá, Quetzaltenango e Izabal, quienes tendrán la responsabilidad de poner en marcha el plan construido al final del acontecimiento, que entre otros aspectos,
persigue la potenciación de nuevos liderazgos, incluir la temática en la agenda de las instituciones públicas que se encargan de los temas indígenas y, establecer al interno de las organizaciones del colectivo, grupos de trabajo que planifiquen acciones que den visibilidad a este tema.
La comisión de seguimiento ha planteado desde ya las reuniones de trabajo, a partir del 2 de septiembre para dar alcance a cada uno de los acuerdos, debido a que existe el entusiasmo de impulsar el trabajo que deba realizarse, para el respeto y cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad de las comunidades indígenas, tema que por primera vez se discute en el país, el cual llegó para quedarse.