La crisis en Venezuela pasó a ser un tema de preocupación en el continente, por ello hay que agotar vías pacíficas para recuperar la democracia plena en la nación petrolera, coincidieron el presidente de Argentina, Mauricio Macri, y el vicepresidente estadounidense, Mike Pence.
“Estados Unidos no se quedará de brazos cruzados mientras pasa lo que está ocurriendo en Venezuela”, afirmó el vicemandatario en la residencia oficial Quinta de Olivos, al norte de Buenos Aires.
Tras expresar su apoyo al pueblo venezolano en su lucha por la libertad, Pence advirtió que debe incrementarse la presión diplomática y económica sobre el régimen de Maduro para restablecer la democracia por medios pacíficos.
Macri fue enfático y resaltó: “La vía no es la utilización de la fuerza”.