La Policía Nacional Civil (PNC), por medio del Comando Antisecuestros, y el Ministerio Público (MP) entregaron ayer a la Justicia a 3 presuntos responsables del secuestro y asesinato de 2 niños, ocurrido en febrero.
Se trata de un caso que aporta pruebas científicas y tecnológicas, con las cuales la Fiscalía deberá demostrar la culpabilidad de los sospechosos de haber enlutado dos hogares que, aunque no se les devolverán esas vidas inocentes, hoy tienen laesperanza de que el peso de la Ley caiga sobre los supuestos criminales.
Este hecho conmocionó a la sociedad, como otros de esta naturaleza en los cuales han intervenido las fuerzas de seguridad, con resultados como el rescate de víctimas y la captura de los victimarios.
Los investigadores de la PNC y del MP utilizaron toda la capacidad humana, tecnológica y científica, que incluyeron el análisis de no menos de 2 mil videos, pesquisas en residencias y negocios, estudio de un vehículo y el perfil de los sindicados.
Es decir, en este caso se puso en práctica la experiencia y el profesionalismo de los agentes de la Policía y de la Fiscalía, quienes se preparan de manera constante en diferentes especialidades, y hacen uso de aparatos de alta tecnología para que su intervención en el esclarecimiento de hechos delictivos sea efectiva.
Sin duda, la sociedad guatemalteca honrada aplaude el desempeño de las fuerzas de seguridad, que llevó a resolver este caso, así como la liberación de otras personas plagiadas en diferentes fechas y regiones del país.
El trabajo de la Policía Nacional Civil, de cara al combate de la delincuencia del crimen organizado, se incrementa cada vez más y se demuestra con los constantes operativos para desmantelar estructuras ilegales.
Los elementos de la institución honran de esa manera el mandato que se les encomendó, de proteger y servir a la ciudadanía, sin importar que arriesgando su integridad, como se evidencia con la muerte de 19 elementos en lo que va del año, en el cumplimiento de su deber.