Chris Froome dio la razón a aquellos que afirmaban que no es el mismo de otros años. El británico, líder del potente equipo Sky, cedió ayer el liderato del Tour de Francia al italiano Fabio Aru (Astana), después de la primera etapa en los Pirineos, ganada por el francés Romain Bardet (AG2R).
Después de esta duodécima fecha, de 214.5 kilómetros, con 6 puertos y final en Peyragudes, de segunda categoría, Aru, quien fue tercero en la meta, saca 6 segundos a Froome en la general, mientras que Bardet está a 25, y el colombiano Rigoberto Urán (Cannondale), segundo ayer, es cuarto a 55, al ser penalizado con 20 segundos por recibir alimentación de forma antirreglamentaria.
“Es verdaderamente una de las cosas más bellas que te pueden suceder en la vida, llevar el maillot amarillo en el Tour de Francia. Nunca lo habría imaginado”, afirmó Aru.
“No será fácil conservarlo, tras el abandono de varios compañeros, pero me quedan otros que son muy fuertes. Vamos a dar el máximo para guardarlo”, añadió el italiano.
Cuando parecía que Froome tenía controlada la etapa, luego de un magnífico trabajo de sus 2 compañeros del equipo Sky, Mikel Nieve y Mikel Landa, el británico no pudo responder al ataque de Bardet, Urán y Aru, y entró en séptima posición, a 22 segundos del francés.
“Fue una llegada muy dura. No me respondieron las piernas al final, pero quedan muchas etapas. Debo felicitar a Bardet por su bella victoria de etapa y a Fabio Aru por su liderato”, dijo Froome con deportividad.