Habilidosa en los movimientos y letal en los golpes, tiene talento para derrochar. Ha brillado y le queda arrojo para deslumbrar. Ni siquiera las adversidades la han logrado opacar. Hay Elizabeth Zamora para rato.
La sonrisa detonada al momento de ser entrevistada, el cabello suelto y radiante, es su distintivo con motivo de su juramentación para representar al país que la vio nacer. Hacía tiempo que no lo hacía.
Por eso le pregunta a un colega “¿Me queda bien el pelo suelto?” A lo que el compañero contesta. “Sí, se te ve bien”, ella refuta, “Pensé que me veía despeinada”.
Zamora no quiere descuidar detalles en su retorno a las competiciones. Y es que la referente del taekuondo nacional volverá a un tatami para combatir, desde que se recuperó de su lesión en ligamento cruzado de la rodilla izquierda, diagnosticada en noviembre de 2015. Intervendrá en el Campeonato Mundial, en Muju, Corea del Sur, a celebrarse del 24 al 30 de este mes, en la división -49 kilogramos.
Que mejor que una contienda internacional para regresar. “No será fácil, pero tengo todas las capacidades para hacer un buen papel. Cada competencia es un mundo”. La lesión la tuvo al margen 1 año y le impidió disputar el certamen más codiciado del planeta, los Juegos Olímpicos de Río 2016, lo que significó un golpe duro para la atleta, quien en Londres 2012, se situó en el quinto lugar.
“El Mundial de Corea es posiblemente el campeonato más fuerte que se disputa en la disciplina, me siento contenta por representar nuevamente a mi pueblo, ya que estaba fuera de competencias desde los Panamericanos Toronto 2015”, manifestó. La reina del taekuondo nacional, explicó que tuvo 2 campamentos de preparación en Managua, Nicaragua, y Monterrey, México, en los cuales se rozó con los mejores atletas.
“Estuvimos entrenándonos bastante fuerte con las selecciones de esos países, fue muy enriquecedor para mí, me topé con colegas de mi categoría y de bastante nivel”, subrayó.
Después del certamen en Corea, la taekuondísta disputará los abiertos de Costa Rica y Argentina y tendrá campamentos como parte de la preparación para los Juegos Centroamericanos
Managua 2017.
La meta
“Mi deseo es comenzar el ciclo olímpico con el pie derecho, me siento bien y creo que será un buen año”, puntualizó la chapina, quien espera finalizarlo con la clasificación a Tokio 2020 y entre sus máximos logros figura el oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Mayagüez 2010 y el bronce en los de Veracruz 2014.
En el Mundial también intervendrán Francisco Palacios en -63 kilogramos y Andrés Zelaya en -68.
