Cuba finaliza esta semana la zafra azucarera de 2017 con un crecimiento de 20 por ciento respecto de 2016, y un cumplimiento de los planes del 85 por ciento, informaron fuentes del sector citadas por la prensa estatal, que no precisaron la cifra total de producción.
La intensa sequía que afecta a la isla, que mermó la cantidad de caña recolectada, y la ineficiencia de la industria, con frecuentes averías y roturas, son las principales razones por las que no se cumplieron las proyecciones, según indicó el vicepresidente del estatal Grupo Azucarero Azcuba, Noel Casañas, al diario Granma.
El grupo había previsto para este ejercicio incrementos de 27 por ciento en los volúmenes de cosecha de caña, y un 45 por ciento en la producción, y aunque no concretó la cifra, se sabe que en febrero se sobrepasó el millón de toneladas, una cantidad que no se había logrado en similar período de cosecha en los pasados 15 años.
“El alto tiempo perdido de la industria, que afectó en un 20 por ciento la molienda” y las “debilidades en la preparación del personal y su disciplina tecnológica, constituyó otro de los elementos que atentó contra el cumplimiento del plan establecido”, reveló el matutino.