La Comisión Europea (CE) quiere que el Reino Unido pague los costes ligados a su salida de la Unión Europea (UE), como la reubicación de las agencias comunitarias y otros organismos, según un documento del Ejecutivo regional publicado por el medio de comunicación europeo Político.
El texto filtrado recoge los principales elementos que Bruselas pretende incluir en las futuras directivas, que se terminarán de perfilar una vez los Veintisiete (sin el Reino Unido) adopten las directrices sobre el Brexit, lo que está previsto ocurra en una cumbre extraordinaria el 29 de abril.
Primeros detalles
En la primera fase de las negociaciones, explica el escrito, se dará prioridad a los asuntos identificados como necesarios para garantizar la salida ordenada.
Entre ellos se incluye la resolución de las obligaciones financieras antes del abandono, es decir, el acuerdo económico, que deberá asegurar que, tanto el bloque como el Reino Unido respetan las obligaciones asumidas antes de la fecha de retirada.
Precisa, además, que debería haber un solo convenio relativo al presupuesto de la UE y al término de la afiliación de ese país a todas las instituciones u organismos establecidos en los Tratados, como el Banco Central Europeo y el Banco Europeo de Inversiones.
Este pacto, prosigue el texto, debe basarse en el principio de que el Reino Unido debe responder a las obligaciones asumidas mientras era miembro de la UE y cubrir plenamente los costes relativos al proceso de retirada, como la reubicación de las agencias u otros organismos de la Unión.
La pretensión inicial de Londres pasaba por conservar, a pesar del divorcio, la Agencia Europea del Medicamento y la Autoridad Bancaria Europea, ambas establecidas en la capital británica.
Asimismo señala que se deberán acordar las modalidades de pago para limitar el impacto de la retirada sobre el presupuesto de la Unión.
Por otra parte, incide en la necesidad de salvaguardar el estatus de los derechos de los ciudadanos europeos en el Reino Unido y de los británicos en los Veintisiete, como primera prioridad de las conversaciones.