Las federaciones internacionales esperan durante el primer semestre de este año un regalo de parte del Comité Olímpico Internacional (COI), en forma de nuevas pruebas para los Juegos Olímpicos Tokio 2020, que en el caso de la Federación Internacional de Natación (FINA) supondría un calendario totalmente reformado, con novedades como los relevos mixtos o los saltos extremos.
La FINA es la federación que ha escrito al COI una carta extensa de peticiones, que afectan a todas sus modalidades: natación en piscina y en aguas abiertas, saltos, sincronizada y waterpolo.
“Hay mucha inquietud en las federaciones”, reconoce Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español (COE) y miembro de ese comité, que preside el italiano Franco Carraro.
La última palabra la tiene, en todo caso, la Comisión Ejecutiva del COI, que escuchará las recomendaciones de esta sobre el programa y tomará una decisión.
En la natación pura, el objetivo de la FINA es incluir los 800 metros libres, también para los hombres, y los mil 500 para las mujeres, por incorporar las pruebas de 50 metros en espalda, mariposa y braza (ya las hay en estilo libre) y por añadir 2 relevos mixtos: 4×100 libre y 4×100 metros.