Los bloqueos que protagonizan miembros del sindicato de trabajadores del transporte pesado en tres aduanas del país desde el pasado jueves, como medida de rechazo por las nuevas restricciones de horario, está impactando en Q35 millones diarios a la meta de recaudación de comercio exterior, informó Werner Ovalle, intendente de Aduanas.
El funcionario explicó que las aduanas de Puerto Quetzal, Tecún Umán y Santo Tomás de Castilla están laborando con normalidad, pero el paro de labores de transportistas, a quienes en solidaridad se les unió un grupo de gestores aduaneros del área, ha dificultado el ingreso y egreso de mercadería.
“No se está teniendo una pérdida en ingresos. Sin embargo, el impacto se verá reflejado en la meta de recaudación de octubre”, explicó el intendente.
Solo en Santo Tomás de Castilla se contabilizan 700 contenedores parados.
Acciones
Ovalle indicó que para resolver esta situación, desde el pasado fin de semana, el Ministerio de Gobernación a través de la Policía Nacional implementó un protocolo de actuación, para garantizar la libre locomoción de las personas y del tránsito.
Agregó que lo más conveniente para ponerle fin a estas medidas, es que las gremiales del país puedan coordinarse con los agentes y gestores aduaneros para que ellos cumplan con su labor.
En ese sentido, Juan Pablo Carrasco, presidente de la Cámara de Comercio Guatemalteco-Americana (AmCham), hizo un llamado al diálogo y que los actores involucrados lleguen a un cuerdo que beneficie a todos, pues estas medidas generan desventaja en la competitividad del país, poniendo en riesgo el suministro y abastecimiento de productos y combustibles en el territorio nacional.
“El sábado 5 de noviembre entran en vigencia las restricciones para el transporte pesado y las sanciones de hasta Q5 mil para los que reincidan en el incumplimiento del acuerdo Municipal 13-2016 emitido por la Municipalidad de Guatemala. Por lo que hay tiempo para dialogar y llegar a un acuerdo”, subrayó.
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