La serie entre los Cachorros de Chicago y los Dodgers de Los Ángeles ha mantenido a los fanáticos de uno y otro bando al borde de sus butacas, y no es para menos, pues cada juego ha desbordado emociones para todos los gustos.
Empatados a 2 juegos, la llave al mejor de 7 llegó al quinto encuentro con grandes expectativas, por la novena de Los Ángeles, que disputaba su último partido como local, y abrió desde el montículo el japonés Kenta Maeda, quien no las ha tenido todas consigo en la postemporada.
Chicago le anotó la primera carrera del cotejo desde el capítulo inicial, obligándolo a lanzar de más, y por esa razón solo resistió 3 entradas y 2 tercios.
Los Dodgers empataron en la cuarta entrada, después de una acción en la que Howie Kendrick se robó la tercera y luego anotó con radado de Adrián González al primera.
Pero los oseznos respondieron en la sexta con un cuadrangular de dos carreras de Addison Russel, quien se voló la barda por segunda noche consecutiva.
Al cierre de esta edición, el cuadro de Illinois se encontraba arriba 5-1 en la parte alta de la octava entrada.
La serie volverá a Chicago a partir de mañana para el sexto duelo, y de ser necesario se jugaría un séptimo el domingo.
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