El partido oficial Rusia Unida se impuso por amplio margen en las elecciones legislativas de ayer, según las cifras parciales, que auguran una victoria cómoda para el presidente Vladimir Putin, que podría aspirar a un cuarto mandato en 2018.
La agrupación del gobernante, consiguió el 49.8 por ciento de los votos, del 20 por ciento de lo escrutado. En segundo lugar se ubicó la organización de extrema derecha LDPR, con 15.7; seguido por el Partido Comunista, con 15.3.
“Podemos decir claramente que nuestra institución ganó”, declaró a la televisión el primer ministro Dmitri Medvedev, quien cabeza de lista de esa entidad política que en 2011 sumó 49 por ciento.
Putin celebró el resultado, pese a que señaló que la participación no fue la más elevada, pero sí fue importante. A las 18:00 horas, el abstencionismo era de no menos del 60 por ciento, según fuentes electorales.
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