El contenido de los Acuerdos de Paz entre el Gobierno de Colombia y las FARC será sometido a consulta popular el 2 de octubre.
Al fin la ruta para firmar los Acuerdos de Paz está más cerca que lejos, de firmarse, este hecho histórico le pondría fin al conflicto armado que duró 50 años. El documento ahora se enviará al Congreso para darle viabilidad legislativa y convocar un plebiscito. Después de un breve período de campañas por parte de partidarios y opositores, el 2 de octubre los colombianos votarán por el Sí o por el No.
El presidente Juan Manuel Santos apostó durante cuatro años de intensas y extenuantes reuniones con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, (FARC) para lograr lo que muchos no han podido; guiar la ruta hacia la paz. Aunque según la sentencia de la Corte Constitucional de Colombia el plebiscito a realizarse no tendrá ningún impacto de modificar las leyes ordinarias, únicamente irá destinado a preguntar si la población está de acuerdo con el contenido de los Acuerdos de Paz, antes de firmarse. No obstante, también se obliga a las partes a dejar las armas antes y durante el proceso de la consulta.
Estos términos causan expectativa, ya que aún no se conoce cómo se formulará la pregunta y cuánto tiempo tomará realizar el plebiscito. De resultar un No, la firma se pospondría hasta llegar a otras negociaciones en el contenido, mas no afectaría la decisión del proceso de Paz.
Tal vez, uno de los puntos a finiquitarse es el de la amnistía para los guerrilleros. La mayor parte había sido acordada por Manuel José Cepeda, asesor del Gobierno, y por el abogado español Enrique Santiago, miembro de Izquierda Unida, asesor de las, (FARC) cuya participación ha sido determinante en el proceso, coinciden los analistas. Las FARC accedieron a que la amnistía se produzca después del plebiscito.
El segundo punto es sobre la incorporación de la guerrilla a la vida política, que tendrá garantizadas 10 curules hasta 2026. paralelamente cuando esté en proceso la reintegración de los guerrilleros a la vida civil. Esta medida podría ser cuestionada por sectores de la sociedad, ya que, aún en términos de la democracia representativa, cuál sería el costo de esta asignación de cuotas, y bajo qué parámetros de elección se realizará.
Por último, el proceso de verificación de Paz será lo que culminará los acuerdos. Para eso, se espera que el evento se convierta en una cumbre de jefes de Estado, la fecha se determinará antes que suceda el sufragio. En conclusión, existen altas expectativas en cuanto al resultado del plebiscito, la legitimidad o no; más que causar un efecto negativo al proceso, será un mensaje claro sobre cómo la sociedad espera aceptar los términos de negociación.
Un proceso que llevará décadas, el proceso de perdón y justicia, que únicamente podrá tener respuesta colombiana. No obstante, parece aún mezquino mencionar que no se está de acuerdo; cuando en términos de paz, significaría un enorme alivio para la población colombiana, y un gran aporte a los procesos de Paz en tiempos democráticos.
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