El santo de fuego muestra momentos interesantes en la historia de América, es en ese instante cuando llegan los primeros conquistadores”, expresó Guillermo Monsanto, director de la producción. Esta puesta en escena es del dramaturgo guatemalteco Mario Monteforte Toledo y fue estrenada en 1987 en la Gran Sala Efraín Recinos del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias. Sin embargo, retorna a las tablas el 16 de agosto en el Teatro Dick Smith del Instituto Guatemalteco Americano (IGA) a las 20:00.
Histórica
Fray Bartolomé de las Casas se presenta en este montaje, como un personaje contradictorio. Por un lado, defendía el alma de los indígenas; por otro, creía que los esclavos africanos se podían explotar en trabajos forzados. Monsanto declaró que la producción es una crítica de Monteforte Toledo a la cultura invasora, a los despiadados métodos de colonización, encomienda, explotación y expropiación a la que fueron sometidos los habitantes del territorio.
En esta propuesta se revelan los intereses políticos, económicos y religiosos de la época, que se manifiestan en la germinación de la cultura. “Algo de lo que estamos viviendo, se habla de corrupción, ambición desmedida, explotación y falta de moral. Pareciera que fuera Guatemala del 2016, porque es la base de ese sistema que estamos viviendo”, puntualizó Monsanto.
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