El Gobierno tiene disponibles Q260 millones para atender emergencias y reducir el impacto que pudieran ocasionar en la población los sucesos meteorológicos, clasificados como el principal riesgo para los recursos del Estado, informó Víctor Martínez, viceministro de Administración Financiera.
“Los fenómenos climáticos representaron un requerimiento de endeudamiento entre el 1 y 2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en las distintas ocurrencias”, manifestó el funcionario, al concluir un taller de discusión de riesgos fiscales, el cual se desarrolló ayer en las instalaciones del Ministerio de Finanzas (Minfin).
De acuerdo con Claudia García, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, es necesario que en la planificación presupuestaria se contemple el impacto de las emergencias que puedan afectar al territorio nacional, con el objetivo de asignar más fondos para mitigar las calamidades.
Más riesgos
En ese sentido, Martínez indicó que están trabajando una separata dentro del proyecto de Presupuesto 2017, el cual deben entregar a más tardar el 2 de septiembre en el Congreso de la República, que explica todos los riesgos fiscales que pueden afectar las finanzas del país.
Entre los peligros que han identificado está el financiero y el político, así como el asociado a las clases pasivas y las compensaciones de los recursos humanos, esta última generó una contingencia de Q900 millones para 2017, sin tener una fuente de ingresos prevista, subrayó el viceministro.
Guadalupe Marroquín, representante de Acción Ciudadana, quien participó en el taller, recomendó al Minfin que la propuesta debe priorizar a la población vulnerable a desastres naturales.
Esta sugerencia fue apoyada por Alejandro Aguirre, de la Coordinación de ONG y Cooperativas de Guatemala, quien agregó que la respuesta ante los riesgos debe abarcar la desigualdad y la pobreza.
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