La optimización en el uso de los recursos es fundamental si el Estado quiere ser eficiente, atender y buscar soluciones adecuadas a los diferentes problemas sociales que enfrenta el país.
En esa línea, y con el fin de paliar la precaria situación en la que el Gobierno encontró la administración pública, el presidente Jimmy Morales ordenó a los diferentes ministerios acogerse a un régimen disciplinario de priorización del gasto, lo cual implicó reorientar el destino de los fondos en cada dependencia.
Esa medida permitió, por ejemplo, paliar la crisis en la red hospitalaria. También se atendió el tema de educación y seguridad, cuyos logros se reflejarán en el informe sobre los seis meses de gestión que presentarán Morales y el vicemandatario Jafeth Cabrera la próxima semana.
En el marco de las acciones de transparencia en el manejo de la calidad del gasto, el Organismo Ejecutivo tuvo un ahorro de Q1 mil 18 millones 700 mil durante el primer semestre del año, los cuales serán utilizados en las prioridades del Gobierno en favor de la población, según el Ministerio de Finanzas. Son recursos que, de no haberse tomado las medidas correctivas, quizás habrían sido utilizados en rubros que no aportan nada en la solución de las diferentes necesidades de la ciudadanía.
En busca de fortalecer la eficiencia, la iniciativa de presupuesto para el próximo año fue analizada en el marco del Gobierno Abierto y, al establecerse los techos para cada ministerio, el gobernante ordenó que los encargados de las instituciones presenten, a más tardar mañana, su plan operativo para la ejecución del dinero.
Guatemala lo está logrando, pero para consolidar el objetivo es necesario que las diferentes instancias que conforman el Estado se apeguen a ese régimen disciplinario, para que al finalizar el año podamos observar otro ahorro y que el siguiente período sea de mejor alcance.
De esta manera, la población verá reflejada la inversión de los impuestos que paga en proyectos de desarrollo y beneficio para las comunidades y en la atención de los servicios más urgentes: salud, seguridad y educación, considerados pilares para alcanzar el bienestar.
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