Para verificar el trato que reciben los migrantes guatemaltecos, en especial los menores no acompañados, al ingresar en territorio estadounidense, el presidente Jimmy Morales visitó ayer el Puerto Fronterizo Hidalgo, la Estación de Patrullaje Migratorio de McAllen y el Centro de Procesamiento Centralizado, en Hidalgo, Texas.
“Hemos recibido información valiosa y estadística que será de gran utilidad para prevenir la muerte de cualquier compatriota, ya que para el Gobierno de Guatemala es primordial la seguridad del connacional, se encuentre donde se encuentre”, manifestó el gobernante.
Acompañado por la primera dama Patricia Marroquín y el canciller Carlos Raúl Morales, el mandatario fue recibido por autoridades de esas instituciones, quienes explicaron sobre los peligros que implica la migración irregular.
Flujo
De acuerdo con la Agencia Nacional de Noticias, Manuel Padilla, jefe de la Patrulla Fronteriza, explicó a los funcionarios chapines que a partir de 2013 los indocumentados del Triángulo Norte de Centroamérica (TNC) (Guatemala, El Salvador y Honduras) superan en un 53 por ciento a los mexicanos.
Datos de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) dan cuenta de que, hasta 2015, las personas que no nacieron en Estados Unidos, pero que residen allí, suman 46.6 millones.
En este sentido, los países del TNC, mediante el Plan de la Alianza para la Prosperidad, con un apoyo económico de EE. UU. de US $700 millones (Q5 mil 411 millones), desarrollarán programas que persuadan a sus poblaciones a no desplazarse irregularmente.
Asimismo, el mandatario visitó la organización Caridades Católicas, que apoya a familias migrantes, y el Consulado guatemalteco fronterizo, en McAllen, para conocer su funcionamiento.
Para hoy se tiene contemplado que el gobernante recorra por tierra y aire la frontera entre México y EE. UU., en el distrito referido, para conocer la metodología que la Patrulla Fronteriza aplica en el tema migratorio, según el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Sobre una declaración que diera al medio The New York Times, el presidente Morales ofreció disculpas por las malas interpretaciones que ocasionó el comentario.
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