En febrero, el sistema bancario desembolsó Q44 mil 466 millones 870 mil 943, en préstamos para el consumo, lo cual representó una subida del 16.06 por ciento en comparación con el mismo período de 2015, según cifras de la Superintendencia de Bancos (SIB).
Ese monto equivale a 2 millones 613 mil 339 créditos autorizados para actividades que van desde la adquisición de bienes durables, como mobiliario para el hogar, prendas de vestir y vehículos, hasta bienes inmuebles para vivienda garantizados con hipotecas.
“La actividad financiera comenzó el año con un buen desempeño y dejó atrás la incertidumbre que se vivió en 2015 por la crisis política. Esto se confirma por el dinamismo que hay entre los agentes económicos, pues continúan demandando recursos para impulsar diferentes proyectos”, manifestó Flavio Montenegro, gerente general del Grupo Financiero G&T Continental.
Financiamiento
En términos generales, el crédito bancario al sector privado, que constituye la principal fuente de financiamiento de la actividad económica, registró en febrero un saldo de Q172 mil 746 millones, lo cual equivale a un crecimiento del 11 por ciento respecto al mismo mes del año anterior.
A decir de Fernando Spross, investigador asociado de la Fundación para el Desarrollo de Guatemala, esta tasa de crecimiento es relativamente menor a la de períodos anteriores, pues a partir de julio de 2015, se dieron 4 meses de incremento. No obstante, ahora se muestra por tercer mes consecutivo una disminución en la tendencia de los préstamos.
Previsión
De acuerdo con la previsión del Banco de Guatemala, el crédito al sector privado tendrá un alza que se situará entre el 9 y 12 por ciento, cifra que sería similar al 12.8 por ciento que se obtuvo en 2015.
En ese sentido, Carlos González, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, dijo que la intermediación financiera, es una de las actividades más dinámicas de la economía y que su crecimiento es superior al 10 por ciento, en promedio, al año.
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