Que todo sea en paz, que no se satanice nada, que en nombre de Dios la Semana Santa sea de lo mejor.
La Semana Santa es tiempo de reflexión cristiana, relajamiento, viajes, compartimiento familiar y con amigos. Se vale que cada quién haga lo que más considera apropiado para oxigenarse del constante vivir de lunes a domingo. Desde el fin de semana principió un movimiento social, económico y político, en todos los sectores de la población, para cambiar de escenario, salir de lo cotidiano y pasar a un tiempo distinto, que se espera con ansiedad de diferentes maneras, en algunos casos cuando existen los recursos, los planes se construyen con tiempo y se hacen las reservaciones, en otros se vive al día.
Haga lo que crea conveniente, pero se necesita que como guatemalteco sensato ocupe su tiempo de manera sana, saludable y con medida, con la intención de tener una semana de descanso sin resultados negativos. Si es cristiano, es un tiempo esplendido para reflexionar, pedir perdón por pecar de pensamiento, palabra, obra u omisión. Si le encanta viajar aproveche para disfrutar de las bellezas de nuestra Guatemala, o conocer otros países. Por otro lado espera con todo el amor la reunión familiar, disfrútela porque nunca se sabe cuándo será la última.
Si todo lo hace reflexionando, es seguro que Dios estará con usted, en cada movimiento que haga, la luz del bien socorrerá su diversión. Guatemala necesita resultados positivos, un índice bajo de accidentes, cero heridos y fallecidos. Hay campañas institucionales, y del sector privado, tratando que todos reflexionemos, que los movimientos y comportamientos individuales y en grupo se hagan en paz, que no exista el abuso y exceso, para no tener consecuencias fatídicas.
Por tradición en Guatemala, en poblaciones urbanas crece la cantidad de gente, es extraordinario observar la concentración de personas que disfrutan de las tradiciones religiosas, en los balnearios, playas y centros turísticos, más almas gozando del tiempo de ocio y solaz esparcimiento. Que todo sea en paz, que no se satanice nada, que en nombre de Dios la Semana Santa sea lo mejor. Los que no piensan salir de su hogar, que también sean bendecidos para que ese descanso o tiempo de lectura, sea aprovechado a lo máximo.
Espero que la maldad descanse y desaparezca, que los pensamientos de discordia, odio, cólera, desunión, egoísmo y rechazo entre humanos, cese por lo menos en la semana de reflexión y reconversión, para que el reencuentro laboral sea productivo y Guatemala resulte favorecida. Reflexionemos como persona, familia, grupo o vecino, estamos comprometidos con los demás. Nada cuesta hacer las cosas como Dios manda. Respetar el derecho de los demás, pensar de manera positiva sin estropear el bien común.
Que la Semana Santa sea para todos los guatemaltecos y los que nos visitan, tiempo de reflexión, individual y colectiva, que lo malo termine y venga lo bueno, que la muerte de Cristo haya servido para el cambio o la reconversión y dejar lo negativo por lo positivo. Que la paz reine en cada uno de los corazones humanos. Disfruten de su descanso como ustedes quieran, pero con medida y sin excesos, recuerde que por un descuido puede terminar con su vida y la de los demás. Me uno a la campaña VeraNO violencia.
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