El exmandatario brasileño Luiz Inacio Lula da Silva asumirá un ministerio clave en el gobierno de su sucesora Dilma Rousseff, informó la Presidencia, con la misión de frenar la hemorragia de un gabinete que cruje entre acusaciones de corrupción y una crisis económica.
El exgobernante, de 70 años y fundador del Partido de los Trabajadores (izquierda), estará a cargo del Ministerio de la Casa Civil, una especie de jefatura que posee una gran influencia en toda la acción gubernamental.
Tras dos jornadas de pláticas, Lula y Rousseff sellaron el acuerdo que vuelve a meter en el juego al hombre fuerte de esa agrupación.
Lula reemplazará a partir del próximo martes a Jaques Wagner, que pasará al gabinete personal de la Presidencia de la República.
Lo previsto
Legisladores del PT habían anticipado la noticia, que según medios locales precede a una reforma ministerial más amplia. La intención es formar un gobierno de notables, con el retorno de algunas figuras que ocuparon cargos durante los 2 mandatos de Lula, entre 2003 y 2010.
El ex jefe de Estado tendrá la tarea inmediata de frenar una potencial diáspora de aliados de la coalición gubernamental que le permita bloquear un pedido de juicio de destitución contra Rousseff en el Congreso por supuesta adulteración de cuentas públicas, mientras él enfrenta investigaciones ligadas a un megafraude en la estatal Petrobras.
Ícono de la izquierda latinoamericana, Lula anticipó que será candidato en las elecciones presidenciales de 2018.
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