El Real Madrid y el Wolfsburgo, que ganaron como visitantes a la Roma y al Gante, respectivamente, abren hoy como claros favoritos la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones.
Sobre el papel, el Real Madrid contra la Roma es el partido estelar del día, aunque la emoción se ha visto rebajada varios grados por la victoria de los españoles en el primer partido, disputado en Italia; no obstante, los merengues insisten en que no se confían y esperan terminar el trabajo sin mayores incidencias en la competición con la que el Real confía salvar la temporada.
En la atmósfera del club hay una calma tensa que entremezcla las buenas sensaciones por el trabajo de Zinedine Zidane con la gran decepción que supuso la derrota liguera ante el Atlético de Madrid.
“La Liga está perdida. La temporada no la vamos a tirar pase lo que pase”, afirmó Zidane tras la derrota frente al Atlético.
Cristiano Ronaldo se manifestó en términos similares, estimando que conseguir el undécimo título europeo en la final de mayo, en Milán, es la tabla de salvación para evitar un nuevo curso decepcionante.
La Roma llegará al partido tras arrollar 4-1 a la Fiorentina en la Serie A, lo que le permitió consolidar su tercer puesto.
El psicodrama alrededor de Francesco Totti parece estar resuelto, puesto que después de haber sido excluido del grupo por haber pedido respeto y más minutos al entrenador Luciano Spalletti, el emblemático capitán, de 39 años, fue reintegrado.
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