Diversas variaciones han ocurrido en la integración de bancadas, desde que se instaló en el Congreso la Octava Legislatura, lo que ha dado como resultado el fortalecimiento de unas y casi la desaparición de otras.
Según los registros de la Dirección Legislativa, hasta el momento, los bloques mayoritarios son Frente de Convergencia Nacional (FCN), con 31 integrantes; Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), 30, y el Movimiento Reformador, 19.
Este último, y Alianza Ciudadana, el cual cuenta con 15 miembros, se conformaron después de que diputados de distintas agrupaciones, principalmente de Libertad Democrática Renovada y Partido Patriota, abandonaran sus filas.
Una muerte anunciada
Las cifras contrastan con los resultados de los comicios de septiembre y dan la razón a diferentes analistas, quienes a finales del año pasado auguraban la reducción de las bancadas roja y naranja, las cuales pasaron de tener 45 y 18 representantes, a 5 y 3.
En opinión de Gerson Sotomayor, politólogo del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales, “era de esperarse que los congresistas se desmarcaran de esos partidos, los cuales sufrieron un fuerte desgaste después de que el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala desvelaran casos de corrupción, en los cuales se vieron involucrados algunos de sus militantes”, entre ellos, las figuras más prominentes en las agrupaciones.
Con esto concordó Ángel Ramírez, director de la Organización Congreso Transparente. Añadió que el surgimiento de nuevos bloques no es novedad, y recordó, por ejemplo, que Todos, ahora con 17 parlamentarios, se conformó en la legislatura pasada con diputados disidentes de la UNE y la Gran Alianza Nacional.
Más variaciones
Según los expertos, debido a que la regulación del transfuguismo contenida en las reformas a la Ley Orgánica del Congreso todavía no cobra vigencia, podrían suceder más cambios en la integración de bancadas.
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