Legitimidad gubernamental: El reto en un inicio de gestión.
Al iniciarse una nueva gestión gubernamental, pensamos cuáles serán sus principales iniciativas a realizar, orientadas al cumplimiento de los deberes del Estado. Dichas iniciativas se plasman en planes de gobierno, o en las emanadas de los primeros discursos del Ejecutivo, debiendo las mismas ser de conocimiento generalizado por parte de la población, que durante el período de gestión exigirá su cumplimento y compromiso.
Como punto de partida para la toma de decisiones públicas en una nueva gestión de gobierno debe considerarse, el análisis de los hechos que no fueron favorables en una pasada gestión para que puedan ser corregidos por la actual administración, evitando su posible recurrencia, y que los mismos puedan afectar a la presente, generando escenarios de ingobernabilidad política.
Estos, son contrarios para ejercer el buen gobierno, razón por la cual, una de las principales acciones en un inicio de gestión, es propiciar acciones para hacerse acompañar de manera responsable en el rumbo de la acción gubernamental, lo cual puede favorecer en generar un escenario de estabilidad política apto para poner en marcha la labor pública.
Los resultados de una buena gestión solo pueden lograrse, si previamente al ponerse en marcha las iniciativas gubernamentales orientadas a superar la problemática nacional, cuentan con el respaldo de la sociedad hacia quienes toman las decisiones de las iniciativas a ser impulsadas.
Entre las acciones de quiénes asumirán el compromiso de dirigir las distintas instituciones y entidades del sector público, se deben definir verdaderas agendas de trabajo en los Organismos del Estado, atendiendo acciones pendientes y puntuales necesarias para el desarrollo de los distintos sectores sociales.
Los funcionarios deben reconocer que es esencial alinear su función como sujetos que toman decisiones al cumplimiento de los deberes e intereses del Estado, basados en el mandato de servir a la sociedad en su conjunto, fundamentados en defender el interés colectivo antes que el interés particular independientemente de compromisos políticos, pero sí guiados por una eficiente dirección política en el ámbito gubernamental.
Deja un comentario