El presidente Jimmy Morales Cabrera informó que será creada una instancia que se encargará de la coordinación, ejecución y monitoreo de los fondos del Plan de Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte de Centroamérica, iniciativa que, con el apoyo del Gobierno de Estados Unidos, busca generar desarrollo en las diferentes áreas donde se produce mayor migración en El Salvador, Guatemala y Honduras.
“La idea es dotar de institucionalidad al Plan, para que permita la utilización más eficiente de los recursos nacionales y de cooperantes, además de que facilite los aportes del sector privado”, manifestó el mandatario, y añadió que, mientras eso ocurre, el país ya posee un mecanismo de diálogo multisectorial, el cual fue instalado el año pasado.
El dignatario emitió ayer estas declaraciones, durante una reunión con socios de la Cámara de Comercio Guatemalteco-Americana (Amcham).
Aportes
EE. UU. aprobó recientemente un aporte de US $750 millones (Q5 mil 700 millones) para la iniciativa regional; no obstante, “la liberación de los fondos dependerá de que cada nación demuestre los avances concretos respecto de los compromisos adquiridos”, refirió el gobernante.
En el caso guatemalteco, “identificó, dentro de su presupuesto, el equivalente a US $875 millones (Q6 mil 650 millones) en concepto de contrapartidas”, por lo que el Programa Nacional para la Competitividad y los Ministerios de Economía (Mineco) y Finanzas Públicas “deberán empeñarse en que los objetivos sean alcanzados”, indicó el Presidente.
Antes de que Morales Cabrera emitiera su pronunciamiento, el embajador estadounidense Todd Robinson declaró: “El Plan aspira a tener un impacto positivo en el desarrollo económico, político y civil de Guatemala”.
Se prevé que la Alianza posibilite la creación de 600 mil empleos, de los cuales 200 mil serían para connacionales, según Morales. En este sentido, Juan Pablo Carrasco, vicepresidente de Amcham, indicó que durante enero fueron cerrados 10 negocios, por lo que instó a que se prorroguen por una década los beneficios de incentivos fiscales contenidos en la Ley de Maquilas.
Al respecto, el jefe de Estado expresó: “No queremos generar privilegios que beneficien un área y perjudiquen a otra. Por eso, nos sentaremos a dialogar con todos los sectores para que no se vaya ninguna empresa que quiera invertir en nuestro territorio”.
Garantías y rol del Congreso
Asimismo, el gobernante subrayó que el país ofrecerá certeza jurídica para los inversionistas.
“Definitivamente, tenemos que generar un andamiaje legal para que las personas que están invirtiendo y las que quieran venir a hacerlo puedan tener las reglas claras y las mejores condiciones; lo que pedimos es un poco de paciencia mientras se analizan los mecanismos y propuestas más acertados”, precisó.
No obstante, muchas de las acciones necesarias para atraer a los inversores se relacionan con la inclusión del tema económico en la agenda legislativa.
“Por eso pedimos al Congreso de la República que se impulse la aprobación de la ley de promoción de inversión y empleo”, recalcó Carrasco.
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