A los 93 años falleció Silvia Pinal, una de las grandes divas de la época dorada del cine mexicano. La artista estuvo hospitalizada en varias ocasiones por complicaciones médicas. Sus familiares la acompañaron hasta su último suspiro.
Actriz, empresaria, productora, presentadora de televisión y política, Pinal, nacida en 1931 en Guaymas, Sonora, deja un legado de más de 60 años. La matriarca de una familia talentosa como polémica arrancó su carrera en 1949, con un pequeño papel en la cinta El pecado de Laura. Después se consolidó con una trilogía de películas dirigidas por Luis Buñuel, que la inmortalizó en Viridiana (1961), El ángel exterminador (1962) y Simón del desierto (1965).
También, compartió pantalla grande en los filmes con los famosos actores del siglo pasado como Mario Moreno Cantinflas, en Puerta Joven (1949), y Germán Valdés, Tin Tan, en El rey del barrio (1950) y Me traes de un ala (1952), y con Pedro Infante, en El inocente (1956).
En pantalla chica
La madre de Alejandra Guzmán se dedicó a la producción televisiva cuando presentó y produjo la serie Mujer, casos de la vida real, de 1986 a 2007. Este fue un programa con formato de telenovela, con el cual presentaba a diario historias centradas en casos de violencia, marginación y discriminación. En la memoria de muchos quedó su famosa frase: “Acompáñenme a ver esta triste historia”.
Tuvo una serie biográfica estrenada en 2019, llamada Silvia Pinal frente a ti. Como productora, realizó las versiones mexicanas de los musicales A Chorus Line (1989), Cat (1991) y La jaula de las locas (1992).
Luego de batallar contra las enfermedades y algunos problemas familiares, la actriz de cine y teatro se despide del mundo terrenal y deja una herencia fílmica para sus compatriotas y el mundo.
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