El alza de precios de los productos de consumo básico de principios de año ha quedado abatida porque las empresas aprovecharon los contingentes sin recargos arancelarios aprobados por el Ministerio de Economía (Mineco).
De los cuatro cupos, el de frijol fue aprovechado en su totalidad. Según la cartera, las 15 mil toneladas métricas (150 mil quintales) ingresaron en el país libres de recargos impositivos, lo cual contribuyó a frenar la escalada que se produjo por escasez en los primeros meses del año. Se espera que con la primera y segunda cosecha, que están en su fase final, permita abastecer la demanda interna.
El maíz amarillo fue el segundo más utilizado por los importadores, quienes trajeron de otros países 642 mil 828 toneladas, o sea 6.4 millones de quintales.
Esta gramínea es otra de las bases de la alimentación de los guatemaltecos, aunque su destino más común es para aves, mayormente gallinas.
Luego aparece el maíz blanco. De los 550 mil quintales aprobados por el ministerio, se importaron 408 mil o el equivalente a 40 mil 841 toneladas.
Finalmente, la cuota menos explotada fue la de arroz con cáscara, pues solo se importó el 47.8 por ciento (33 mil 472 toneladas). Según las autoridades, este grano, aunque también es parte de la canasta básica alimentaria, no es tan indispensable como el resto, y de ahí que haya sido menos aprovechada la ventaja arancelaria.
Freno a la inflación
Según el vicepresidente del Banco de Guatemala, Alfredo Blanco, a agosto, el ritmo inflacionario se ubicó en 3.78 por ciento, dentro de la meta determinada por la Junta Monetaria (4.0% +/- 1 punto porcentual), como resultado del efecto de las acciones adoptadas.
Durante el primer semestre del año, se produjeron alzas de precios debido a factores como la tardanza en el inicio de la temporada lluviosa y el incremento en los precios internacionales del petróleo. Ese escenario ha cambiado, precisó el banco central.
