El manejo de los puestos administrativos 022 y 029 han generado polémica, sobre todo por las plazas fantasmas y contrataciones numerosas y sobrevaloradas halladas en diferentes dependencias del Gobierno, así como en el Congreso.
Durante su informe de los primeros 30 días de trabajo, el presidente Bernardo Arévalo destacó que han retirado a 878 personas que tenían esos tipos de puestos o que no se justificaban, lo que daba indicios de irregulidades en sus actuaciones.
Los casos más criticados se registran en el Parlamento, donde autoridades de la Junta Directiva revelaron que en los últimos años las contrataciones bajo este régimen se cuadruplicaron, lo que representó un aumento en el gasto del 934 por ciento.
4 veces creció el reclutamiento de personal en el Congreso.
En 2016, el Legislativo tenía 68 contratos administrativos 022; sin embargo, a diciembre de 2023, el número se incrementó a 321. Mientras que el personal administrativo 029 en 2016 era de 21 plazas, el año pasado llegó a 79, según lo revelado.
El informe divulgado por la primera secretaria, Karina Paz, indica que ello representa un incremento de 425 por ciento en cuanto a las contrataciones. “Todo va a depender de los recursos que utilicemos con los planes y proyectos que tengamos. Ninguna legislación será igual; si ellos logran reducir o no contratar personal, qué bueno”, expuso Shirley Rivera, expresidenta del Congreso.
Edgar Balsells, analista independiente, recordó que en Guatemala no existe una ley de servicio civil. Destacó que ahora se lleva a los familiares, novias y allegados, en su mayoría, que no tienen la capacidad para desarrollar las funciones.
“Se abusa porque es lo fácil de contratar; son más difíciles las plazas 011. El tema es que deben ser contratos temporales para asesores específicos de buen nivel, pero hay ocasiones en que son analfabetas y están como profesionales”, concluyó el experto.