El artista visual, fotógrafo, ciclista y educador José Oquendo seleccionó retratos de su investigación sobre fotografía editorial de moda y las posibilidades del género y el cuerpo. Abre las puertas al público para mostrar su primera exposición individual llamada La variabilidad de la mirada, la Elocuencia de la imagen, un ensayo/juego fotográfico sobre la plasticidad corpórea y la imaginación.
Es un trabajo creativo de ocho años que durante su proceso exploró técnicamente con su ingenio, ya que usó una bolsa plástica de supermercado como filtro de flash y el reflejo de la luz del sol a través de un espejo que recorre toda la ciudad acompañando al fotógrafo. Otras veces, las imágenes se crean desde la intimidad de un apartamento que se convierte en un escenario para la performatividad de estas personalidades que juegan el sueño de vestirse y la realidad de ser ellas mismas.
“Ninguna revista de moda podría capturar la esencia de una sonrisa amiga o descubrir el concreto que moldea los cuerpos como arquitecturas contemporáneas en esta gris ciudad discriminatoria y conservadora”. Josseline Pinto Curadora
Oquendo compró varias revistas en 2015 y 2016 como Purple Fashion o King King, que le gustan mucho, porque encuentra instantáneas en las cuales no posa la típica modelo que caracteriza Super High Fashion, delgada y estética o las fotos no están demasiado retocadas, sino que eran tomadas de manera espontánea. De ahí surgió su idea y empezó a conocer a las personas fotografiadas. “Al final se apropiaron muy bien de las prendas y su personalidad y lo expresan mucho porque todos están conscientes de su figura”, refirió.
Josseline Pinto, curadora de la muestra, señaló: “Su trabajo fotográfico es un juego de miradas y encuentros. Con una particular atracción hacia los cuerpos diversos, sus amigos son el sujeto central de las imágenes. Cada uno además participó del proceso de investigación al jugar con sus propias creaciones de vestuario y utilería, sus tesoros de la paca o de invaluables colecciones heredadas que cobran una altura sublime casi etérea al modelarse frente a la cámara. Este es un registro de archivo documental de las siluetas que habitan la ciudad de Guatemala como su pasarela, como sujetos que pertenecen tanto a la fantasía como a la realidad”.
Malabares, performances y flashes
A sus 16 años, junto a un amigo descubrió el malabarismo y aprendió también la profesión de clown (payaso), que desempeñó en diversos proyectos como Freskolongo. Sin embargo, el futuro le deparaba otra sorpresa cuando encontró una cámara guardada por su mamá, que el fotógrafo descubrió y se la apropió. Así documentó lo que ocurría durante un año en su colegio y lo que siguió fueron más estudios, participaciones en la Bienal de Arte Paiz, Juannio y más.
Se graduó de licenciado en Historia del Arte y tiene diversos diplomas y cursos en fotografía y arte contemporáneo. Hoy es asistente de los artistas Naufus Ramírez-Figueroa y Regina José Galindo; además dirige el estudio fotográfico OKPH en la ciudad de Guatemala.
Ha documentado los backstage de las pasarelas de las marcas de ropa de Alexander Ayala, Mynor Véliz y Rogelio Escobar y SinGénero, entre otras. Su más reciente trabajo retrata de manera editorial la moda urbana en Guatemala.
Dato
La serie fotográfica puede apreciarla hasta el 30 de noviembre en Tantadinamita (7ª. avenida 13-01, zona 9, La Cúpula, local 14), de lunes a jueves, de 9:00 a 13:00.
Sígalo en su Instagram como @oquendo.jo