Su buen humor, cabello largo y talento caracterizan al dibujante guatemalteco Marco Antonio Cospín, quien cumple tres décadas de dibujar, los cuales festeja con su exposición Sonrisas de papel.
Su experiencia abarca varios medios de comunicación escrita que dieron a conocer su trabajo a mano, dibujo humorístico y que con los años combinó con técnicas digitales. Desde pequeño, se motivó a dedicarse a esta profesión cuando observaba el proceso de Walter Lantz al ilustrar la caricatura El Pájaro loco.
Sus incios
La primera oportunidad que le brindaron profesionalmente fue en Prensa Libre, en la sección de tiras cómicas, que se publicó durante diez años.
“Mi segmento de la Cosquillaba trataba de chistes, en el que dibujaba personajes, animales, situaciones de la temporada; cada día era algo diferente.
Esto para que cada uno lo observara detenidamente, leyera el texto y le encontrara la gracia del momento”, expresó el caricaturista.
La otra etapa de su carrera arrancó en 2004, que lo consideró un año de muchos movimientos, pues ganó el concurso de dibujo del periódico al Día, para la portada del suplemento La Matraca, y a los meses ingresó a trabajar en ese diario.
Cospín usa marcadores, papel, crayones, porque aseguró que con estos materiales sencillos todavía se logran buenos resultados; asimismo, vivió el salto al trabajo digital.
En la actualidad desea seguir ilustrando, y afirmó que lo hará hasta el fin de sus días: “Me he resistido a desarrollar otro oficio, he sido fiel a mí mismo”. Colabora para la revista Chiltepe News, de Palín, Escuintla, para mantenerse vigente; sin embargo, continúa con la búsqueda de oportunidades de proyectos en los cuales se involucre durante una buena temporada.
Dato
Sonrisas de papel está abierta al público en el Centro Cultural Mosaico (10ª. calle 4-19, zona 1). hasta el 4 de mayo. Para más información, contacte a mosaicoguatemala.org y también en el Instagram del artista caricartoon21.