Ocho semanas después del socavamiento en el kilómetro 44 de la ruta al Pacífico, autopista Palín-Escuintla, el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV) agilizaba ayer los últimos detalles para habilitar dos carriles, los cuales, se contemplaba, quedarían listos en las próximas horas.
Las autoridades de la cartera indicaron que las dos razones para que el trabajo se haya demorado más de lo estipulado son el clima y porque se ha privilegiado que las labores sean de calidad, a fin de garantizar que no vuelva a ocurrir una emergencia como la de hace dos meses.
Trabajo de calidad
Aunque el daño parecía pequeño, la realidad es que la tubería que pasaba por debajo del kilómetro 44 estaba tan dañada que ponía en riesgo a los miles de vehículos que transitan por el sector, según los supervisores de la obra.
“Estamos hablando de ingeniería, estándares de construcción que deben respetarse si la obra va a ser de buena calidad”, explicó el titular del CIV, Félix Alvarado, quien se reunió, en Palín, con diputados del Movimiento Semilla y Sonia Gutiérrez, del Movimiento Winaq.
Alvarado detalló que la fase dos de la reparación podría finalizar en 50 días, pero dependerá, primordialmente, del clima. La apuesta es dejar expeditas dos vías: una hacia el norte y otra al sur.
En esta segunda fase se tiene previsto la finalización total del relleno y la construcción de muros de contención, así como la colocación del pavimento
en la carretera.
“Ha habido personas trabajando desde el día uno y se ha caminado al ritmo que se puede hacer”, explicó el ministro.
En la junta con los parlamentarios también participaron autoridades indígenas de Palín y funcionarios de la Dirección General de Caminos, quienes analizaron las condiciones para la viabilidad en el área dañada.
